Pérez Zeledón. El Cerro Chirripó es la cima más alta del país, el Cerro Chirripó. A diario subían y bajaban decenas de turistas, tanto nacionales como extranjeros.
17 kilómetros de ascenso y 17 de descenso hasta el albergue Base Crestones.
Este recorrido lo hacían a diario los arrieros, quienes se encargan de subir y bajar maletas, alimentación y otros.
Esta actividad, les permite generar ingresos a sus hogares.
Desde mediados de marzo con el cierre de los parques nacionales, todo cambió, la actividad que realizaban fue suspendida y sus ingresos son cero.
La actividad turística, una de las más afectadas por el Covid-19, está generando preocupación a estas familias.
Pero, ante estas circunstancias, hay una mano amiga, un grupo de montañistas encabezado por Geovanni Rodríguez, les tendió la mano.
A caballo, en carro o en moto, como pudieron, así se llegaron a llevarse los paquetes de alimentos que recibieron los arrieros del Parque Nacional Chirripó.
Se trata de la entrega de 270 diarios para 90 familias de cuatro comunidades como son San Gerardo de Rivas, Canaán, Herradura y además, San Jerónimo de San Pedro.
La solidaridad es el primer valor del montañismo, de ahí deviene el trabajo en equipo, el acompañamiento y los logros grupales.
Por ello, agradecen a las personas, empresas y organizaciones que hicieron posible este esfuerzo.
Ellos están muy agradecidos por la ayuda.
De esta manera, los arrieros del Chirripó, esos amigos que suben y bajan recibieron colaboración, en estos momentos tan difíciles que están pasando.
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