Golfito. Como parte de la lucha que libran a diario las autoridades nacionales contra la evasión fiscal, oficiales de la Policía de Fronteras decomisaron ayer un cargamento de licores contrabandeados desde Panamá cuyo valor, en suelo nacional, podría superar el millón de colones.
El cumplimiento estuvo a cargo de personal destacado en el puesto policial de Kilómetro 35, distrito de Guaycará de Golfito, durante un control de carreteras efectuado en la llamada Calle La Gamba, una reconocida ruta alterna que comunica Golfito con la Carretera Interamericana Sur, la cual es utilizada frecuentemente para traficar todo tipo de mercancías ilegales procedentes de la frontera sur.
En ese lugar, los oficiales fronterizos revisaron un automóvil procedente de la frontera con Panamá, el cual era guiado por una costarricense de apellido Godínez, quien no presentaba ninguna documentación que lograra comprobar el debido pago de impuestos.
Dada la evidente infracción a la legislación tributaria, la mercadería, consistente en 180 unidades de rones de varias marcas, fue decomisada y puesta a la orden de la Policía de Control Fiscal, a fin de que se procediera a su destrucción.
Ello en virtud de la también evidente violación a la legislación sanitaria, pues dichas bebidas podrían constituir un eventual riesgo a la salud humana al no haber garantía de que el contenido corresponda al etiquetado de los envases, pues podría tratarse de un producto adulterado.
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