Mientras la mayoría de costarricenses duermen hay otros que emprenden viajes, sin hora definida de retorno a sus hogares, para cumplir con una importante labor.
Es el caso de los choferes de hospitales de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), en la zona sur del país, quienes cruzan el Cerro de la Muerte a la media noche o durante la madrugada para llevar pruebas covid-19 a los laboratorios en San José donde las procesan para obtener los resultados.
Don Víctor Camacho Azofeifa, de 56 años, es uno de esos funcionarios de Transportes de la región Brunca que maneja hasta 700 kilómetros al día para llevar pruebas de pacientes hisopados en el hospital Manuel Mora Valverde de Golfito al laboratorio del hospital San Juan de Dios en la capital.
Cuenta don Víctor que le ha tocado cruzar el Cerro de la Muerte a todas horas del día y con las inclemencias del tiempo más fuertes que puedan darse en un trayecto de 700 kilómetros entre ida y vuelta.
Otros funcionarios del hospital de Golfito que también recorren las calles de Costa Rica, tanto por la Costanera Sur como por la ruta nacional número 2, son Maquir Cruz, Guillermo Céspedes, Allan Mora, Daver Salas y Dinney Zúñiga.