Las personas quienes escalen el Cerro Chirripó, se encontrarán con una serie de nuevos rótulos que, además de la ubicación, les brindan información para tomar la ruta más segura por medio de más de 100 rótulos que les marcarán el camino desde el kilómetro 0 hasta llegar a la cumbre, a 3.820 metros de altura.
Las condiciones de humedad de la zona, deterioraron los primeros rótulos que fueron colocados hace más de 12 años, haciendo que la travesía dentro del Parque Nacional Chirripó se tornara un poco peligrosa por falta de señalización, lo que hizo necesario un trabajo se sustitución de estos.
El Banco Nacional (BN) en coordinación con el Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC) y la Asociación de Desarrollo Integral de Potrero Grande en la Zona Sur, lograron que todos los senderos del Parque Nacional Chirripó, a lo largo de sus 50.000 hectáreas, cuenten con toda la señalización para que sea un lugar más seguro.
Los rótulos nuevos fueron confeccionados con 6500 kilos de residuos no valorizables, mientras que los rótulos retirados se convirtieron en bancas y otras cosas necesarias en el parque nacional. Además, se destaca el trabajo de los arrieros de la zona, quienes fueron los encargados de subir los materiales.
Franz Tattembach, ministro de Ambiente y Energía, indicó que la nueva rotulación en el Parque Nacional Chirripó, tiene como propósito, ordenar los procesos de comunicación no personal con los visitantes de las áreas protegidas, facilitándoles información básica, significativa y precisa sobre el ASP, y adentrarse en el conocimiento e interpretación del patrimonio natural costarricense presente en ese lugar.
Agregó, además, que, “La nueva rotulación tendrá la finalidad de orientar, informar, recrear, guiar, dirigir, regular y proporcionar seguridad a los visitantes durante su experiencia en esa área silvestre protegida.
Durante el recorrido hacia el cerro Chirripó, se puede encontrar un espeso bosque con una gran diversidad de especies, que luego se torna nuboso, en la que se puede observar, un área llena de plantas que cubren los troncos y las ramas de los árboles, a estas plantas se les conoce como barbas de viejo.
Luego se visualizan plantas herbáceas y una gran cantidad de animales como la danta, el cabro de monte, pizotes, zaínos, tepezcuintle, felinos y mono araña entre otros, además de una impresionante cantidad de aves.
Siendo consecuente con el entorno natural y la biodiversidad de la zona, los rútulos también representan un trabajo de conservación.
Están elaborados con más de 6.500 kilos de residuos no valorizables, un trabajo 100% amigable con el ambiente. Además, los rótulos que se sustituyeron fueron utilizados para construir bancas o estructuras necesaria para los visitantes.
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