Pérez Zeledón. Ana Prado, tiene ya unos 20 años de llegar siempre al Día de los Difuntos en el Cementerio Municipal en Pérez Zeledón.
A diferencia de muchos que llegan a limpiar tumbas o a compartir con sus seres queridos que ya partieron, ella se dedica a vender flores plásticas.
Afirma que este trabajo lo hacía su papá y se los heredó.
Tanto coronas como flores, la población compró estos productos para colocarlos es las tumbas, principalmente por la durabilidad.
Un día como hoy, venden hasta 70 ramos.
También, hay quienes se acercan a vender pero flores naturales, que lo digan Alberth Acuña y Adrián Arias, empleados de un vívero, a quienes asignaron para comercializarlas.
De esta manera, un día como el de Difuntos, se convierte en un ingreso adicional para familias y empresarios.
| 