Tanto al número de su casa como al de su celular, se le antepone un dígito.
En el caso del teléfono residencial será el número 2 y al celular un 8.
Un imprevisto crecimiento en la demanda de servicios celulares y residenciales, generó que la numeración de 7 dígitos implementado en 1994, proyectado para soportar 40 años , quedara limitada en el 2006..
Establecer un nuevo plan de numeración que responda al esquema regulatorio vigente proporcionar una solución.