Pérez Zeledón. En el Hospital Escalante Pradilla, como en otros del país, existe la situación de saturación de pacientes y por ello la Cruz Roja, incluso, deja dos camillas allí en caso de necesitarlas cuando se debe pasar a un paciente de la ambulancia al centro.
El problema es que una ambulancia sin camilla no puede utilizarse, lo que significa que si no tiene camilla debe quedar fuera de servicio. Y las consecuencias no son positivas, pues en caso de que hagan un llamado de emergencia, sólo una ambulancia estaría disponible en caso de que sólo una esté equipada con camilla.
Así que este es un asunto preocupante, Carlos Fernández, administrador de la Cruz roja en Pérez Zeledón, espera que tras la construcción del nuevo edificio de emergencias, también obtengan más equipo que es necesario para la mejora de la atención a los que lo necesitan más : los pacientes.
Al parecer, esta necesidad está pendiente de ser cubierta y hay buena voluntad para ello, lo que parece ser es que hace falta presupuesto.