Las relaciones fraternas entre Costa Rica y Panamá, como es usual a lo largo de toda la frontera común, posibilitaron salvarle la vida a un adulto mayor panameño que sufrió un accidente en el campo.
El incidente se registró el pasado domingo en Punta Burica, cantón de Golfito, en la frontera con Panamá, luego de que a don Luis Olmedo Salas García, de 78 años, le cayera un árbol encima mientras realizaba labores en su finca.
El adulto mayor presentaba diversos golpes y heridas, por lo cual sus familiares buscaron la ayuda de los oficiales de la Policía de Fronteras, los cuales poseen un puesto en este remoto rincón de la geografía nacional.
Tal y como ha sucedido otras veces con emergencias ocurridas en Burica, los policías fronterizos, además de brindarle primeros auxilios al paciente, realizaron coordinaciones con las autoridades de Panamá.
Ello debido a la imposibilidad de trasladarlo hasta un centro médico nacional, lo que implicó que lo llevaran, a bordo de una patrulla, hasta la línea limítrofe, donde fue recibido por policías del Servicio Nacional de Fronteras (SENAFRONT) del vecino país.
Ellos se encargaron de movilizarlo hasta el Hospital de Puerto Armuelles, en la provincia de Chiriquí, donde recibió la atención médica urgente que requería.
De esta manera, una vez más, las relaciones cordiales entre Costa Rica y Panamá permitieron efectuar una nueva operación humanitaria en favor de los pobladores de este alejado punto de la geografía nacional.