Carmen Picado N.
Pérez Zeledón. En las carretas, se apreciaban decenas de niños con sus padres y madres, abuelas, hermanas o hermanos.
También, halando los bueyes; la actividad se convirtió en un momento para compartir con la familia.
Al respecto, Monseñor Guillermo Loría, resaltó esa participación de la familia, uno de los principales ejes que se promueven en la Iglesia.
Monseñor, también dijo que espera que la familia se siga uniendo en actividades como esta y que lo hagan además, en todo momento.