Pérez Zeledón. Con la interpretación de la primera estación, donde Jesús es sentenciado a muerte, inició la representación en vivo del santo vía crucis por las principales calles de la ciudad.
Precisamente, como si se tratara de la época de los apóstoles, como si fuera aquel tiempo cuando Jesús predicaba en la tierra y como si se estuviera viviendo en vivo la muerte de Jesús en el Calvario, así se dramatizó el viernes santo en San Isidro de El General.
Decenas de personas se encarnaron en un personaje distinto, sin embargo, el más llamativo era el que interpretó a Jesús de Nazaret.
De esta manera, cada una de las estaciones fueron representadas.
Durante el vía crucis, se hizo la representación de las tres caídas con la cruz.
Y culminó con la crucifixión de Jesús.
Para este Vía Crucis se utilizaron prendas y decoraciones alusivas a esos tiempos, aquí se dramatizó el dolor, la tristeza, pero también la alegría y el regocijo.
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