Pérez Zeledón. Martes tras martes se repite la historia y este 26 de enero no fue la excepción, pues los gritos de la regidora, Kemly Jiménez y de algunos vecinos, hizo que el presidente municipal, David Araya, solicitara la presencia de la Fuerza Pública.
Para ello, hizo un receso, mientras llegaban a los efectivos, a las siete y 35 minutos, llegaron y se continuó con la sesión.
Según el nuevo reglamento, a quien genere disturbios, sobre todo un regidor, se le llama la atención en tres ocasiones, si no hace caso, se le quita la curul y hasta se pide la intervención de la policía.
Ayer fue otro día, los efectivos se hicieron presente y se tranquilizó la situación, sobre todo al público, que también estaba gritando. Luego, continúo la sesión con normalidad.