Pérez Zeledón. Mantener una adecuada o mayor distancia respecto al vehículo que circula delante es uno de los consejos de la Policía de Tránsito, a propósito de las condiciones climáticas que imperan en buena parte del país y a las puertas de la consolidación de la fase más lluviosa del invierno, en los meses de setiembre y octubre.
Asimismo, reducir la velocidad habitual a la que se circula es otra de las recomendaciones que el cuerpo policial desea dar a los conductores, tanto de carros, como de autobuses, motocicletas y bicicletas. También se les recuerda no quedarse detenidos en las zonas amarillas en las intersecciones, tanto para no causar congestionamiento como para no aumentar el riesgo de un choque.
Las condiciones de lluvia pueden influir a favor de los accidentes, ya que no siempre la capacidad de frenado de un vehículo es suficiente si la calle está mojada o se habitúa, en condiciones de congestionamiento vial, a viajar muy cerca del vehículo de adelante,
Revisar que todas las luces funcionen adecuadamente permite evidenciar la presencia de otros vehículos en las vías. No esperar a que anochezca para encender las luces es vital, pues según las condiciones climáticas a mitad de la tarde la oscuridad puede ser importante, producto de la lluvia y hasta de la neblina.
La misma recomendación de luces va para los motociclistas y ciclistas, que con más razón deben portar ropa reflectante de la luz y una luz encendida, las 24 horas del día, para hacerse más visibles.
En el caso de los motociclistas y ciclistas, se les pide tener cuidado con los derrapes, sea al pasar por tapas de alcantarilla o la línea férrea, pues estos metales se vuelven resbalosos al contacto con el agua. Lo mismo ocurre con los famosos “muertos” o reductores de velocidad, en su modalidad de montículos de asfalto o metálicos.