Pérez Zeledón. Randall Portilla es un joven de 32 años, es de Desamparados en San José y cumple una sentencia en la Unidad de Producción Integral de Pérez Zeledón, su historia, sus logros como residente, su familia, el fin de año privado de libertad, este es su testimonio.
Durante este 2017 logró una de sus grandes metas, él consiguió el título de bachillerato tras mucho esfuerzo.
Portilla cuenta como tuvo que cambiar de pensamiento, pues cuando estaba libre dejó los estudios de lado y se concentró en otras cosas menos positivas.
El esfuerzo valió la pena y la dedicatoria de ese título para la familia que lo apoya en todos los momentos dice este joven Desamparadeño.
Para el, la familia es un pilar fundamental y es el bastión en momentos complicados, aunque la tiene lejos pues él es residente en Pérez Zeledón y su familia vive en la capital.
El fin de año tras las rejas se vive con nostalgia, viendo las fiestas desde lejos pero sabiendo que tienen que pagar por lo que un día hicieron, aunque no oculta que los últimos minutos del 31 de diciembre son muy difíciles para algunos y hasta por ahí alguna lagrima se asoma.
El paso del tiempo lo hizo cambiar de mentalidad, pensar en otras prioridades y ese es el mejor consejo que Randall Portilla envía a las personas, bajar revoluciones, compartir con la familia, aprovechar el tiempo, estudiar, consejos importantes de un hombre que ve hacia el frente y aunque hoy está privado de libertad, sueña con grandes cosas.