Vida con humildad, trabajo y devoción, comunidad Menonita.

Cinthya Avila

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Pérez Zeledón. Esta cultura o religión, está distribuida en todo el mundo, y en varios puntos de Costa Rica habitan estas personas.

Pérez Zeledón no es la excepción, aquí podemos encontrar una de estas comunidades en el sector llamado Santiago en el distrito de San Pedro, desde 1978. Además como dato curioso ellos cuentan con su propio cementerio.

Dentro las nacionalidades que podemos encontrar están costarricenses, nicaragüenses y estadounidenses.
A 30 minutos de la Ciudad de San Isidro de El General, radican estas humildes y trabajadoras personas, quienes diariamente trabajan en diferentes labores, entre ellas y como principal está la dedicación a Dios y la atención de sus familias.

Para los menonitas no hay nada más importante que Dios y la familia, es por esto que dejan de lado cualquier vanidad, avaricia o distracción que les impida fijar sus ojos en sus principios cristianos.
No obstante, en esta religión saben que deben subsistir, y para ello trabajan fuerte por salir adelante cada día.
Durante todos estos años han crecido y las labores han incrementado.
Los menonitas dan la bienvenida a los visitantes desde el punto donde se encuentra su propio supermercado, Santiago.

Éste es atendido por la señora Carmen Paniagua, ella junto a su esposo lo administran. En el súper Santiago se le vende a todo el que desee comprar. Es un supermercado común, como muchos en el cantón. Además este matrimonio inicio un proyecto de producción de café con la marca JAVATAZA.
Pero no solo en el supermercado se trabaja, también se dedican al mantenimiento de una granja donde se producen cientos de huevos, gracias a mas de 500 gallinas ponedoras las cuales son bien cuidadas.

La granja está a cargo del señor José Paniagua y su esposa, si usted desea conseguir huevos caseros, este es un buen lugar para que los compre y de paso colabores con estas personas.

Mas adelante en nuestro recorrido encontramos la escuelita cristiana de Santiago, la cual es atendida por dos maestras, una de ellas es Anita Ulrich, quien es de nacionalidad estadounidense pero hace tiempo decidió quedarse en Costa Rica.

En esta escuelita encontramos unos 16 alumnos entre hombres y mujeres, con edades entre los 6 y los 15 años, quienes con mucho respeto nos recibieron y hasta una linda canción nos cantaron.

Los niños todas las mañanas al iniciar las lecciones, lo hacen alabando a Dios, con hermosos cantos, posteriormente se ubican en las clases normales, ya sea estudios sociales, ciencias, matemáticas y lenguajes y como en todas las escuelas deben esforzarse para ganar el curso lectivo.

Por cierto, aquí se imparte las clases en dos idiomas, inglés y español. Esto debido a que se cuenta con familias provenientes de los Estado Unidos, y por ende sus hijos hablan inglés.

En el recreo los niños y las niñas disfrutan de diferentes actividades, entre ellas del futbol, chicos y chicas forman su equipo, se preparan y a jugar se ha dicho, aquí lo que menos interesa es el uniforme, lo que cuenta es meter goles.

Luego de haber compartidos con las maestras y los alumnos seguimos nuestro camino y nos encontramos con la oficina Monte Sion, aquí hay variedad de libros todos con mensaje cristiano y para edificación de las personas, los menonitas los venden en diferentes puntos del país.

Luego decidimos acercarnos hasta el centro de producción Tico Porcina, donde se producen chanchos, bajo altos niveles de calidad.

Por ejemplo aquí nos encontramos en el área fertilización y producción de chanchos.

Luego de que se consigue la gestación se pasa al sector de de maternidad, donde las madres paren a sus puerquitos y por supuesto los amamantan, después del desmame los pequeños chanchitos pasarán a el área de engorde, aquí permanecerán al menos unos 6 o 7 meses.

Cuando ya estén listos volverán al área de gestación, pero esta vez para ser reproducidos. Finalmente serán vendidos.

Terminamos este recorrido en centro de producción de cerdos, pero no en la comunidad menonita, pos supuesto no nos podía ir de este lugar sin visitar la panadería.

El aroma a pancito salado y deliciosos repostería se percibía de lejos, aquí fuimos recibidos por un matrimonio con sus pequeñas hijas y un bebe en brazos, ellos junto con unas cincos mujeres más preparan el pan que en muchas ocasiones usted puede adquirir en la feria del productor generaleño, así como en las ferias del agricultor en Quepos y Jacó.

El Pancito de canela, la granola, queque seco y pan integral entre otros ricos bocadillos, hacen de esta cocina un deleite que les traerá una entrada económica a esta comunidad.

Bien, después de una visita muy enriquecedora, llegamos al final de nuestro recorrido, pero no podemos despedirnos, sin antes invitarlos a conocer personalmente a estas personas y sus costumbre, recuerde que en Pérez Zeledón está ubicados en la comunidad de Santiago, en el distrito de San Pedro, a solo 30 minutos del centro de la ciudad de San Isidro.