Carmen Picado N.
Pérez Zeledón. El juez, José Cambronero, indicó que no hay pruebas físicas ni materiales que demuestren que Patton asesinó a su esposo ni tampoco de que hubo un suicidio.
Tampoco, una prueba importante que confirme las razones por las cuales ella quisiera acabar con la vida de su esposo, ya que solo surgieron especulaciones.
El Tribunal no tuvo la certeza de la ubicación real de varios artículos como el arma y el casquillo, que al parecer, pudieron ser movidos de la escena real.
Igualmente, la posición del cuerpo, quedaron en duda si corresponde o no a la que tenía en el momento del disparo.
También, encontraron que Bender tenía un trastorno de bipolaridad y con antecedentes suicidas, hasta siete años antes del suceso.
La reacción de Patton fue inmediata y se mostró contenta ante la resolución del Tribunal.
El defensor, Fabio Oconitrillo, se mostró complacido, pues aseguró que desde el inicio del proceso mantuvieron la tesis de que Bender se suicidó.
La audiencia por este caso duró una semana y contó con 25 testigos.
La lectura completa de esta sentencia será el 28 de enero a las 4 de la tarde.
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